Inmuebles
Alerta: denuncian posible derrumbe en Nueva Córdoba
Vecinos de la zona están preocupados por el estado de dos casas que están apuntaladas. "La Municipalidad no nos controla", expresó el abogado de los dueños de las viviendas.

Inquilinos de un edificio y vecinos están preocupados por el estado de dos casas que están apuntaladas, que han cedido y presentan múltiples grietas en calle Ituzaingó al 1.200, casi esquina Chile, en el barrio Nueva Córdoba.
Mónica, la administradora de un edificio, manifestó en diálogo con El Show del Lagarto que empezaron a notar en los departamentos de los primeros pisos, que están colindantes con las casas, que se empezaron a agrietar las paredes.
«Hay un agrietamiento en los primeros pisos. En cualquier momento se van a reventar los vidrios», expresó la mujer. Y agregó: «Se hizo la presentación en Aguas Cordobeses y en la Municipalidad. Aún no tenemos respuestas. Nosotros no podemos romper y hacer los peritajes, eso lo tienen que hacer las entidades que correspondes».
Según comentó la administradora, en el edificio la mayoría de las personas que viven son estudiantes y se asustan con los ruidos que se escuchan en el silencio de la noche. «En enero se profundizó la situación. Ya hay algunas puertas y ventanas que no se pueden cerrar», explicó.
Mayra, que vive en el primer piso, indicó que con el sismo de enero se empezaron a notar las primeras rajaduras en profundidad. Un arquitecto constató que no fueron por el sismo, sino que fue por otro movimiento del suelo.
Pablo Loza, abogado de los dueños de la casa que está apuntalada, y que presenta múltiples daños, señaló que «la Municipalidad no viene a controlar». Y agregó: «El problema es externo. No es de los inmuebles».
Asimismo, el letrado declaró: «Defensa Civil y Bomberos no nos dieron bolilla. Aguas Cordobesas solo hizo el apuntalamiento que se ve. Y la Municipalidad no controla».
«Socavamiento hay seguro, porque sino el inmueble no se hubiera dañado. Hemos tenido un caso muy similar hace años acá a dos cuadras. El suelo firme en esta zona está casi a 18 metros de profundidad. Estas propiedades más viejas, con cimientos muy buenos, no llegan a esa profundidad como el edificio», sostuvo Loza.
Y concluyó: «Hay que ver cómo está hundida la vereda. Acá algo pasa y falta respuesta. Todas las veredas están inclinadas. Esto es humedad. No es otra cosa».
Fuente: El Show del Lagarto, La Voz.
Fotos: Ramiro Pereyra – La Voz.