Conmoción por el asesinato de un cura

El cura párroco de la pequeña ciudad de Vicuña Mackenna, en el departamento provincia de Río Cuarto, fue asesinado en las últimas horas durante un intento de robo en su parroquia. Se trata de Jorge Vaudagna, de 59 años. Hoy fueron detenidos los dos sospechosos del homicidio.

Un joven de 23 años fue el primero en ser capturado sospechado de haber sido el autor del asesinato. El hombre quedó imputado por homicidio calificado por el uso de arma de fuego en concurso con la participación de un menor de edad, según informó el Ministerio Público Fiscal (MPF). Por la tarde aprehendieron a su cómplice: un chico de 16 años que fue puesto a disposición de la Justicia Juvenil ya que es inimputable.

Vaudagna fue asesinado de tres disparos según los análisis preliminares del médico policial, aunque resta confirmarlo con la autopsia que se realizará en Río Cuarto. Hacía 10 años que estaba en esa localidad. Su cuerpo fue encontrado ayer alrededor de las 21 en el garaje de la iglesia localizada en pleno centro de la ciudad, que se ubica a unos 100 kilómetros de Río Cuarto y donde viven unas 7.000 personas.

«El sacerdote habría estado grabando la misa en un domicilio del pueblo y, al finalizar, regresó a la parroquia. En el momento en el que guardaba su camioneta, aparentemente, fue sorprendido por una persona que le propinó, según los vecinos, unos 3 disparos», publicó Martín Urricelqui, periodista de Río Cuarto, en su cuenta de Twitter. Asimismo, las primeras informaciones indican que el sacerdote fue sorprendido por los delincuentes cuando llegaba a la parroquia en su camioneta.

Las pruebas que recolectaron los peritos en la escena del crimen serán clave para conformar las pruebas contra el sospechoso de 23 años: se halló un arma calibre .22, dos casquillos del mismo calibre y un barbijo que, según fuentes de la investigación, no pertenecía a la víctima y podría tener el ADN de su asesino.

Para intentar dilucidar la secuencia del crimen, desde que Vaudagna fue asesinado hasta la retirada de los sospechosos, en estas horas se analizarán las cámaras de seguridad de los comercios cercanos a la escena del crimen. Estas cámaras habrían registrado el trayecto de las personas que habrían dado muerte del cura párroco, que se habrían retirado de a pie, según explicó el fiscal de Río Cuarto que investiga el caso, Daniel Miralles.