Salud

Alertan que aumentaron las consultas por insolaciones y deshidratación en niños

Desde el Hospital Pediátrico de Córdoba informaron que, frente a las altas temperaturas en la provincia, se registra un incremento en los casos. Qué recomendaciones hay que tener en cuenta para evitar los golpes de calor.

Desde el Hospital Pediátrico de la ciudad de Córdoba informaron que a partir del sábado pasado, cuando comenzaron las intensas temperaturas en la provincia, se incrementaron las consultas por insolaciones y deshidratación en niños.

De acuerdo a lo que informó La Voz, la mayoría son menores de 5 años que permanecen algunas horas internados en guardia y son dados de alta.

Cecilia Angulo Bocco, directora del centro de salud, explicó que la mayoría de los pacientes quedan internados unas horas, donde reciben un suero, porque llegan con deshidratación. Solo un niño debió permanecer internado, pero en sala común, porque llegó en un estado más crítico y no alcanzó la hidratación de la guardia.

«Siempre insistimos en que los menores de un año permanezcan hidratados. Darles el pecho cada una hora, por más que no lo pidan y no exponerlos al sol directo», dijo Angulo Bocco.

Los primeros casos comenzaron a recibirse la semana pasada, con dos pacientes que consultaron por guardia. Sin embargo, el incremento mayor se dio a partir del último sábado.

Algunos niños llegan después de haber estado en el río, sin protección, o expuestos al sol en piletas. Cabe señalar que las carpas no previenen el golpe de calor. Al contrario, los favorecen, porque los bebés se pasan horas ahí y esos lugares no cuentan con ventilación. Es preferible que usen sombrillas.

Los síntomas más comunes son insolaciones, deshidratación y quemaduras de primer y segundo grado. Esto es, piel enrojecida o ampollas.

Para prevenir el golpe de calor, la directora de la ex Casa Cuna indicó que los menores de un año no deben permanecer bajo el sol directo. Explicó que su sistema de regulación de temperatura se encuentra inmaduro, algo similar a lo que sucede con los mayores de 70 años.

Es por eso que los dos extremos de la vida son los más susceptibles a la hora de padecer un golpe de calor. También tienen una mayor predisposición los obesos y los hipertensos.

El golpe de calor se caracteriza por una desnaturalización de las proteínas a nivel corporal. Los primeros órganos resentidos son los músculos. Los calambres, el aumento de la frecuencia respiratoria y los dolores abdominales son los síntomas más comunes. En los casos más extremos se puede producir el paro cardíaco.

En los niños puede provocar síntomas neurológicos, como decaimiento, cambios en el estado anímico, mareos, náuseas, irritabilidad. El Pediátrico no ha recibido por el momento casos de golpe de calor con este tipo de manifestaciones, sí insolaciones y deshidrataciones.

En clínicas y hospitales que atienden adultos, las guardias atienden mayoritariamente pacientes con Covid-19 o que presentan síntomas compatibles. No se asisten hasta ahora tanto golpes de calor, a diferencia con lo que pasa en los centros de salud pediátricos e infantiles, confirmó Carlos Mulqui, secretario general de la Asociación de Médicos de Guardia de Córdoba.

Sin embargo, en el interior son más los casos, en especial, en los centros turísticos. Aquí se suele dar una mayor exposición de las personas al sol, ya sea en balnearios, natatorios o ríos.

Los especialistas recomiendan evitar el ejercicio físico desde las 10.30 hasta las 16. Hicieron extensiva esta sugerencia a las escuelas de verano, al pedir que en esa franja horaria los profesores opten por juegos más sedentarios y sin exposición al sol.

Los menores de 5 años y mayores de 70, quienes son los más propensos a sufrir un golpe de calor, deben estar hidratados, en lugares ventilados. Los bebés deben hidratarse cada una hora.

Asimismo, se recomienda evitar el alcohol, ya que genera más calor interno y transpiración. También hay que prestar especial atención a los alimentos. En estos tiempos son comunes las gastroenteritis por intoxicaciones alimenticias, sobre todo en los productos que perdieron la cadena de frío, como mayonesa, leche y yogurt.

Fuente: La Voz.