Conmoción en Córdoba: hallaron los cuerpos de las hermanas asesinadas en barrio Autódromo

Los cuerpos que corresponderían a las dos hermanas que habrían sido asesinadas por familiares y enterradas en su propia casa fueron halladas este viernes, tras dos días de búsqueda. Las mujeres, identificadas como Esther y Sara, vivían en barrio Autódromo, de la ciudad de córdoba.

De acuerdo a lo que informó Vía Córdoba, del operativo participó personal policial y del Departamento Unidades de Alto Riesgo (DUAR). Las víctimas tenían 41 y 39 años.

El primer hallazgo se produjo durante la mañana de este martes. «El cuerpo se encontraba en el pozo, a unos 50 metros de profundidad. Está íntegro y será trasladado a la morgue, donde se le realizarán las pericias correspondientes», detalló Mauricio Funes, del Departamento Homicidios de la Policía de Córdoba en diálogo con Noticiero Doce.

Los acusados, que confesaron el hecho, se llaman Ismael y Esteban Castro, de 29 y 24 años. El mayor es hijo de una de las mujeres, mientras que el menor sería sobrino.

El segundo cadáver fue encontrado horas después, ya pasado el mediodía. Cabe destacar que las personas que trabajaron en la vivienda ubicada en calle Oscar Cabalén al 6.500 debieron actuar con mucho cuidado ya que «al pasar los 50 metros de profunidad, el pozo se enangosta hasta los 50 centímetros de diámetro».

El presunto crimen se descubrió de casualidad, ya que ningún familiar había reportado las desapariciones. Según detalló El Show del Lagarto, el sábado a las 16, automovilistas que circulaban por las Altas Cumbres dieron aviso de una columna de humo que se divisaba en el sector.

Ante esto, una patrulla de Policía Caminera se acercó al origen del humo y descubrieron que se trataba de una fogata doméstica. El fuego se había preparado en una alcantarilla y sólo quedaban unos restos, lo que les hizo pensar que alguien había pasado la noche ahí.

Mientras patrullaban el sector, se encontraron con seis personas, dos adultos y cuatro niños, que caminaban con bolsos por la vera de la ruta. Al ser consultados por los efectivos, los jóvenes dijeron que se dirigían a Mina Clavero para vacacionar.

Sin embargo, los uniformados decidieron llevarlos hasta la comisaría de Ischilín, ya que sospecharon del testimonio y circulaban con menores de edad. Cuando llegaron al destacamento, dieron como domicilio la vivienda de barrio Autódromo y los contactos de emergencia eran de las dos mujeres fallecidas.

En el grupo, había un bebé de un año, dos niños de 6 y 12 y una adolescente de 17 quien se quebró ante la policía y reveló que los mayores del grupo habían asesinado a las mujeres.

Los jóvenes, según revelaron fuentes relacionadas al caso a La Voz, confesaron a otros familiares, por mensaje de texto, que mataron a ambas mujeres a golpes y con disparos de arma de fuego.

Ante los hechos, la fiscal Andrea Martin, del fuero de Violencia Familiar de Córdoba, imputó por homicidio calificado al mayor de los Castro y, por ahora, por homicidio simple al menor. La joven de 17 fue acusada de encubrimiento agravado.

Los vecinos contaron que se trataba de una familia muy disfuncional. Una de las mujeres resaltó que en la casa vivían entre 12 y 13 personas, sobre todo niños. «Son todos NN para mí, no iban a la escuela, no los llevaban a los médicos», explicó.

Otra de las vecinas que brindaron su testimonio manifestó que la familia realizaba «rituales satánicos» durante la noche y aseguró que la mayoría de los habitantes de la casa «no tenían vida social», a excepción de una de las fallecidas que trabajaba en un lavadero de la zona.

La familia presentaría un dudoso entramado familiar, donde se habrían producido una serie de abusos sexuales que no permitirían conocer a ciencia cierta quién es hijo de quién. Especialmente entre entre víctimas y victimarios.

«Sabemos que las dos mujeres eran hermanas. Pero, ¿y los acusados? En principio, uno de ellos es hijo de una de ellas. Y el otro, sería sobrino de ambas. No está claro el vínculo entre los dos varones. O son primos o son hermanos», expresó una fuente consultada por La Voz.

Fuente: La Voz, Vía Córdoba.

Fotos: Javier Ferreyra.