Cuatro cordobesas crían a los caballos «más lindos del mundo» y en peligro de extinción

El haras «El Soñado», ubicado en la ciudad de Córdoba, resguarda a siete Akhal-Teke, la raza de caballos «más linda del mundo». En unos días, recibirá a los tres restantes de América Latina y así tendrán 10 de los 7.000 ejemplares en el mundo.

En diálogo con Vía Córdoba, la encargada del lugar, Ana Maldonado, contó cómo comenzó esta historia. «Estamos trabajando para recibirlos de la mejor manera», explicó.

La mujer es una de las representantes de la raza turcomana que está en peligro de extinción. «Los encontré en Internet de casualidad y me contacté con un uruguayo que me permitió conocerlos», contó sobre su primer encuentro con los animales.

En una primera instancia, ella le compró sus dos primeras yeguas embarazadas y un padrillo al profesional Guillermo Lockhart. Ahora, él le donó sus otras Akhal para que pueda llegar a los 10 ejemplares.

Así, ellos se incorporaran a la Quinta que ostenta tres hembras de Akhal-Teke, dos patrillos Akhal-Teke, dos yeguas árabes muniqui y dos criollos. Junto a Maldonado la acompaña su esposa, Andrea González, quien también es la mano derecha en este proyecto.

Asimismo, Lucía Buteler es la domadora de caballos y «los manza», indicó Maldonado. Además, Virginia Oroná es la cuidadora. Maldonado, analizó que «cada caballo sirve y se destaca en algo», y que lo mismo sucede con las personas que conforman este grupo de mujeres.

Cabe señalar que, en la antigüedad, estos animales fueron valorados por su belleza, resistencia, carácter fuerte y brillo en su pelaje. «El vigor y valentía que heredaron de la guerra se adapta para las disciplinas ecuestres», analizó Maldonado.

Algunas de las prácticas en las que se destacan estos caballos son eduro, cross country, saltos, adiestramiento y volteo. Según explicó Maldonado, «son caballos atletas, inteligentes y dispuestos a aprender». Respecto a la conformación física, detalló que son magros, fibrosos y delgados.

Cómo es la rutina de los caballos

Respecto a su rutina, la mujer explicó: «A la mañana les damos de comer y después de la digestión los largamos en los piquetes para pastorear». Luego, Buteler se encarga de que los equinos hagan ejercicio.

A la tarde, vuelven a sus corrales, meriendan y se quedan allí hasta que es la hora de la cena. Las «guardianas» intentan recrear y mantener el estado más natural posible de los animales, por lo que les dan comidas de poca cantidad para que no se estresen y eviten problemas físicos.

Los tres primeros Akhal-Teke del establecimiento fueron las yeguas Aglaia y Gagushka y Galeno. Pampero y Zarina nacieron en el haras y habrá nuevos alumbramientos el mes próximo. Gaguska se encarga de cuidar a las hembras del lugar.

El objetivo de las cordobesas

Maldonado es médica por las mañanas y pasa sus tardes en el campo. Aseguró que su objetivo es criar y promover los ejemplares de raza pura y darle importancia a las cruzas. En este sentido, proyectó que el arribo de la raza procedente de Turkmenistán servirá para mejorar otras.

Hace un tiempo, Maldonado y González fueron invitadas al país ubicado en Asia Central con el motivo de la celebración de los Akhal-Teke. «Hubo una fiesta durante cinco días donde carreras y eventos con los caballos. Un espectáculo hermoso», destacó.

En tanto, la mujer contó que participarán en la edición número 20 del evento Nuestros Caballos. Se trata del escenario de las exposiciones nacionales de todas las razas de Argentina, con participación de las cabañas y los criadores más importantes del país y la región.

Allí, se hará la presentación oficial de la raza en el país. «Viene una especialista española, Blanca de Toledo, para ayudarnos a explicar todo lo inherente a los especímenes», contó la cordobesa.

Fuente: Vía Córdoba (Vía País).