Un joven vio el teléfono tirado en su calle y, tras su buena acción, decidió dejarle un mensaje al dueño. Los chicos finalmente se volvieron a encontrar.
La dueña del local se refirió al asalto que sufrieron en manos de dos ladrones, que también atacaron al proveedor de pan. "Lo dejaron atado", relató la mujer.
Los ladrones se cruzaron con el proveedor de pan que llegaba a dejar sus productos. Según el dueño del comercio, los delincuentes se llevaron cigarrillos, papas fritas, alfajores y hasta bon o bon.