El acusado fue declarado inimputable y se instaló en un pueblo vecino. El intendente de la localidad se manifestó en desacuerdo con la decisión de la Justicia.
Aprovechando la ausencia del hombre, los delincuentes se hicieron pasar por él y extorsionaron a la mujer por teléfono. El hecho ocurrió en la localidad de Jovita.