Deuda externa
Nueva negociación de la Provincia con los acreedores
Córdoba no puedo cumplir con la reestructuración de la deuda y va por la quinta propuesta de reperfilamiento. José María Rinaldi, docente de la UNC, explica qué implica el default para la población.

Córdoba no pudo cumplir el 9 de diciembre con la reestructuración de la deuda, teniendo como plazo máximo hasta el 10 de enero para hacerlo, lo que no sucedió. Actualmente la provincia va por la quinta propuesta de negociación sin éxito desde el 11 de septiembre, cuando comenzó el proceso de renegociación.
El pasivo alcanza los 1.685 millones de dólares y la mayoría vence en 2021. El resto, vence con intereses, en 2024 y en 2027. Los acuerdos apuntarían a mejorar la oferta con el Grupo Schroder.
La última oferta que realizó el gobernador Juan Schiaretti para reestructurar la deuda externa fue el 4 de enero, donde se dispuso que el 30% de los intereses devengados e impagos sea abonado en efectivo y, el resto, mediante la emisión y entrega de Títulos de Deuda Modificados.
Sin embargo, este plan no recibió el respaldo necesario del 60% de los bonistas, por lo que Córdoba acordó mejorar la oferta. Tras las cinco negociaciones previas que ya habían sido rechazadas, la Provincia acuerda ahora con el grupo Schroder Investment Management North América Inc.
Si bien se acordó una oferta de mejora de la reestructuración de la deuda, no se detallaron aún los pormenores del reperfilamiento.
De esta forma, la Provincia entra en default por no poder pagar la deuda externa. La pregunta es cómo esto afectará a los cordobeses en el día a día.
Según José María Rinaldi, docente de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), la deuda se paga por dos vías, una es la recaudación tributaria, es decir impuestos a los consumos, que lógicamente afecta a todos los cordobeses y, a su vez, por la coparticipación estatal. De esta forma, se genera una doble dependencia: por un lado, del cordobés y, por el otro, del Estado Nacional.
La otra vía es ajustando el gasto, lo cual implica recortar en lo cotidiano, en los gastos provinciales de todos los días, lo que afectaría directamente en los sectores más vulnerables.
Por estos motivos es que el default generaría una gran vulnerabilidad en las finanzas públicas y, por ende, terminaría por influir de forma determinante en el bolsillo y la vida cotidiana de todos los cordobeses. Además, es necesario destacar que la deuda aumenta mes a mes debido a que está en dólares.
«Los acreedores están muy firmes de no aceptar, hasta casi enojados», señaló el docente de la Facultad de Ciencias Económicas en diálogo con Es por acá de Radio Universidad.
Rinaldi también apuntó a las distintas versiones que han dado el anterior gobierno y el actual para evitar afirmar que la Argentina estaba en default: «No es un estado intermedio, o estás en cesación de pago (default) o no estás».
Para concluir, el docente expresó que para el gobierno provincial significará una gran limitación en la gestión económica, generando la imposibilidad de acceder a créditos de cualquier tipo debido a que «con esos antecedentes nadie le va a prestar un peso a la provincia».