Justicia de Córdoba

Nueva pista: hallaron documentación de Mariela Bessonart en el campo de su exesposo

La mujer desapareció en 2005, en Villa María, y al día de hoy su paradero es un misterio. El nuevo material encontrado estaba enterrado a un metro de profundidad.

En las últimas horas, la Justicia accedió a una nueva pista sobre el misterio de la desaparición de Mariela Bessonart, cuando hallaron documentación en el campo de su exesposo Rodolfo Delpino. La mujer desapareció en septiembre de 2005, en Villa María, y su paradero continúa siendo una incógnita.

A poco de cumplirse 16 años de la desaparición, desde la Fiscalía de Segundo Turno del Tribunales de Villa María, a cargo de Juliana Companys, se ordenaron excavaciones y operativos vinculados a la causa.

De acuerdo a lo que informó La Voz, en uno de esos rastrillajes hallaron documentación de Mariela Bessonart en un campo de su expareja, que está imputado por la causa. El material estaba enterrado y no se encontraron restos óseos, según informaron fuentes judiciales.

Este nuevo descubrimiento reavivó las expectativas de la investigación por el paradero de la mujer. La documentación se encontró enterrada a un metro de profundidad. Ahora, se analizarán estos papeles para ver si tienen o no vinculación con la causa.

Las pesquisas comenzaron los primeros días de agosto con participación de la Policía Federal, Policía Judicial, Gendarmería Nacional, personal del Ministerio de Seguridad de la Nación, bomberos voluntarios y personal de la Fiscalía de Segundo Turno a cargo de Juliana Companys.

La actividad se intensificó a partir del miércoles 18, con un rastrillaje minucioso en campos pertenecientes a Rodolfo Delpino, exmarido de Bessonart, y único imputado en la causa por su desaparición.

Como parte de la búsqueda se hicieron rastreos con la utilización de georradares y perros especializados, hasta que se llegó al levantamiento del piso de un galpón situado junto a la casa de campo. También se rastrillaron y excavaron en viejas taperas, lugares donde supuestamente, según la investigación, se lo habría visto al exmarido en algún momento.

La fiscal mantiene en reserva cuáles serán sus próximos pasos.

Mariela Bessonart tenía 37 años al momento de desaparecer. Durante los primeros años se llevaron a cabo intensos rastrillajes y operativos de búsqueda en distintas partes de la provincia de Córdoba, siempre con resultados negativos.

El único imputado que tiene la causa es Delpino, a quien se mantuvo detenido alrededor de un año en la cárcel de Villa María, hasta que recuperó su libertad. Sigue pendiente de su realización el juicio requerido por el anterior fiscal del caso, Gustavo Atienza, ya jubilado.

La acusación inicial era por supuesta «sustracción y ocultamiento de persona con fines coactivos», pero luego se redujo a «privación ilegítima de libertad», una calificación menor.

Fuente: La Voz.