Pandemia
Tras las críticas de Trotta, Cardozo defendió las clases presenciales
El ministro de Educación apuntó duramente contra Córdoba por el regreso de los alumnos a las aulas. "Porque los chiquitos vayan a la escuela no va a colapsar el sistema", expresó por su lado el ministro de Salud provincial.

El ministro de Salud de la Provincia, Diego Cardozo, salió a defender la postura de Córdoba de mantener las clases presenciales a pesar de la suba de contagios de Covid-19, tras los cuestionamientos que llegaron desde la Nación por dichos del presidente Alberto Fernández y el ministro de Educación, Nicolás Trotta.
«No comparto, segundo no quiero entrar en polémica. Nosotros somos muy responsables y ya lo dijo Grahovac cuidamos a nuestra gente, vengo trabajando con el equipo de salud para resguardar la integridad y a eso lo tiene claro la gente», respondió el ministro en diálogo con Radio Mitre Córdoba, respecto a las declaraciones de Trotta.
Asimismo, Cardozo agregó: «Porque los chiquitos vayan a la escuela no va a colapsar el sistema de salud. Las escuelas siguen siendo seguras, los niños están más resguardados esas 4 horas que en otros ámbitos».
«He tenido 15 internados en el sistema sanitario pediátrico, ahora quedan 11-12, ¿esos chicos se infectaron en el ámbito escolar? no. La escuela es segura, esos chicos se contagiaron en el ámbito familiar o social», manifestó el funcionario, según informó Vía Córdoba. Y agregó: «Siempre que las condiciones sanitarias nos permitan, uno de los ejes de la política que tenemos es garantizar la presencialidad».
A su vez, Cardozo remarcó: «No es lo mismo la virtualidad que la presencialidad, todos sabemos, el chico que va a la escuela genera empatía, estímulos, es diferente». Y añadió: «Ni hablar el contexto social que tienen los colegios públicos nuestros. Siempre que podamos mantener la presencialidad lo vamos a hacer, los chicos están seguros en las escuelas».
Por otra parte, el ministro de Salud también apuntó contra quienes organizan fiestas clandestinas y a los que asisten. «Endurecer las penas puede ayudar pero no es la solución. Yo creo que más allá de los controles que tenemos que seguir haciendo, como sociedad, somos los que tenemos que no participar porque hay un irresponsable que organiza pero atrás hay otros que asisten», sostuvo.
«En los últimos 14 días la mortalidad que veníamos teniendo en personas entre 40 y 55 años aumentó un 62%. Esa gente son padres de familia o madres, o son sustentos de familia», detalló el funcionario. Y concluyó: «Están quedando chicos huérfanos porque esa gente, ese joven de 40 años que va a una fiesta, luego tiene una complicación, fallece y deja a la familia partida por la mitad, el impacto social es tremendo».